viernes, 4 de marzo de 2016



 Nuestro proceso de madurar no debe nunca de romper la esencia de lo que fuimos de  niños.
 Nunca dejes de imaginar, de crear y tener la mente sencilla y sin egoísmos para entender  el mundo que nos rodea, y sobrellevar lo que implica ser un adulto. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario