martes, 14 de abril de 2009

ZIRO. Mi gran amigo.


 
 
        Tenia diecisiete años.No caminaba sobre nubes de algodón.Pero caminaba a mis pies siempre que llegaba a casa.Me miraba cuando abría la nevera. “Pero Ziro .¿Cuando has tomado tu ensalada?.” De vez en cuando me arañaba porque yo le cabreaba. Amigo Ziro.Porque realmente has estado conmigo estos años.Porque has sido fiel y solo me has pedido un poco de agua y una bolas de comer... quiero despedirme de ti.... porque tu lo has echo de mí.Amigo mio. Te recordaré durante toda mi vida.Porque me has dado mas que mucha gente de mi alrededor. Y estés donde estés,te pido que me esperes.por favor, Volveremos a jugar juntos. Querido Pasos Silenciosos.Gracias por haber sido mi amigo.

miércoles, 8 de abril de 2009

Amargo como la vida, suave como la muerte,dulce como el amor.













Ceremonia del té SAHARA

Tienen los saharauis la costumbre,
como anfitriones magníficos que son,
de obsequiar a sus visitantes
con
una ceremonia misteriosa:
La primera infusión con hojas de té fuerte, sin azúcar,
es amarga y vivificante…
A la segunda, con las mismas hojas,
se le añade un poco de azúcar.
Es un sabor sugerente y acogedor.
El tercer té lleva mucha azúcar,
con lo que la infusión es cálida, sensual.
Amargo como la vida, suave como la muerte,
dulce como el amor.

Sin duda es una tradición que resume la propia vida
y nació de miles de horas de silencio y meditación
en las jaimas, frente a los infinitos
ocres de los desiertos.
No sé por qué me acuerdo de los pueblos del Sahara.

a golpe de latido
una metáfora conduce a la otra. Una piel a otra piel.
Será porque estos días soy más feliz que nunca.


Amargo como la vida, suave como la muerte,dulce como el amor.